Por suerte la semana anterior a nuestra llegada había nevado bastante y a pesar de no haber tenido un invierno muy nivoso, nosotros pudimos disfrutar de la nieve recién caída.
Muy pronto empezamos a ver las crestas nevadas adornando el horizonte y sentimos como la temperatura empieza a descender por momentos. Paramos en un pequeño pueblo una segunda vez, esta vez para aprovisionarnos de víveres para nuestra semana de travesía. Aquí sorprendentemente empezó a llover intensamente y el viaje ya de por si largo se ralentizó un poco más. Las cosas fueron empeorando, y la lluvia ya nos impedía tener buena visibilidad. Tanto es así, que nos perdimos. Y el conductor empezó a perder la calma cuando se dio cuenta de que nos habíamos desviado y se nos empezaba a echar la noche encima. Para nuestra sorpresa la nieve hizo su aparición hasta en la carretera y sin esperarlo nos vimos ascendiendo por una pista, helada por tramos, con la furgoneta cargada y sin cadenas. Gracias a la pericia del conductor no nos quedamos atascados en la pista, en la que dejamos atrás varias furgonetas incapaces de bajar hasta el día siguiente. Nevando y con la pista helada conseguimos llegar sin cadenas a nuestro ‘’Gîte d’ètape’’ sanos y salvos. Este fue el fin de nuestra primera aventura.
24 de marzo - Arous n Ikkis / Colado de Tizi Tarkedyit (3400 m) Refugio Tarkedyit ( 2900 m)Etapa alpina - 1200 m _ 550 m_ 6 horas.
Al día siguiente, contra todo pronóstico, amanecimos con un día espléndido, despejado y soleado. Nuestro gîte, enclavado en el valle de Arous, nos permitía disfrutar de unas espectaculares vistas de las imponentes cimas nevadas que nos rodeaban. Sin duda el contraste entre los arenosos pueblos de casas de adobe y el blanco de las montañas atraía poderosamente nuestra atención. Empezamos a caminar a las 8 de la mañana, ya que la jornada de hoy no es muy larga.
Tras sortear la pequeña población de Arous, y ante la curiosa mirada curiosa de sus habitantes, comenzamos nuestra ascensión hacia el collado de Tarkeddyt, que sortea el monte del mismo nombre. Una subida que nos adentra al gran plató encerrado entre las crestas de Mgoun (4068 m) y Tarkeddyit ( 3565 m).
Ikkis
Descendemos al Plato por la empinada ladera norte, y por fin nos adentramos en las montañas nevadas de este espectacular macizo. Llegamos a buena hora al pequeño refugio de Tarkeddyt.
Con dos únicas habitaciones, completas este fin de semana por el grupo de Geográfica y nosotros. Ambos con la intención de acometer mañana la ascensión al Mgoun y aprovechar el buen pronóstico meteorológico.
25 de marzo - Refugio / Cumbre del Mgoun (4068 m) / Refugio Etapa alpina - 1150 m _ 1150 m_ 7 horas.
Finalmente decidimos salir a las 7 de la mañana después de un suculento desayuno. Muy tarde según el criterio de algunos, entre los que me cuento.
Antes de partir rellenamos nuestras botellas
El día está totalmente despejado y parece que los famosos vientos que suelen azotar ésta zona nos van a dar una tregua. En la imagen se puede ver la ruta normal de ascensión a la cima de Mgoun, ruta que nos disponemos a seguir, y que cómo se puede observar es bastante larga desde el refugio. Ya que además de la prolongada ascensión después aún nos restan 3 km de cresta a 4000 m hasta alcanzar la cima ‘Jebel Oumsoud’ (4068 m).
La ascensión fue muy muy larga, quizá ralentizaba por el calor que pasamos todos.
En general esperábamos tener peor previsión, y todos llevábamos ropa de abrigo y pocas prendas de verano. Así que además de padecer las altas temperaturas, y a pesar de nuestras precauciones, casi todos terminamos con quemaduras en la cara y los labios.
Debido a la disparidad de ritmos en el grupo, durante la subida nos dividimos en dos desde casi el primer momento. Los que avanzábamos más aprisa conseguimos llegar a la cima de ‘Jebel Oumsoud’ sobre las 15:00 horas, no sin esfuerzo. El resto no consiguió llegar , ya que el guía nos había advertido que de no alcanzar esta cota antes de esa hora debíamos bajar y no continuar. Así que el resto llegó hasta la mitad de la cresta aproximadamente. En la cima había bastante viento y tuvimos que estar poco tiempo. Y además olvidamos la bandera de Pegaso, un descuido imperdonable…el único que llegó y mostró la chapita de Pegaso fue Nacho.
En la cima nos encontramos con el grupo de Geográfica que decidieron bajar por el otro lado de la cresta en vez de bajar por donde habíamos subido, aunque algunos pensaron que ya era demasiado tarde para llegar por el otro lado y nuestro guía nos lo desaconsejó. Finalmente nosotros llegamos al refugio escalonadamente sobre las 7 de la tarde y ellos llegaron sanos y salvos a las 2 de la mañana.
26 de marzo – Refugio/Cumbre Tarkedyt/Agouti (1800 m) Etapa alpina - 750 m↑_ 1.400 m_↓ 7-8 horas.
Este día estaba prevista la ascensión al pico Tarkedyt junto al collado al que da nombre. Sin embargo analizando fríamente el programa nos dimos cuenta que no teníamos tiempo suficiente para hacer el pico y llegar a nuestro siguiente destino, Agouti. El ritmo del grupo, según el guía, no es el adecuado para afrontar la subida, así que por unanimidad decidimos abandonar el intento para otra ocasión, y tomarnos la jornada de regreso hacia el collado con calma. Aunque algunos, si decidieron hacerlo a pesar de todo y lo consiguieron.
Llegamos al gîte que abandonamos el primer día sobre las 5 de la tarde. Recogemos el equipaje que dejamos aquí antes de partir y nos ponemos en ruta hacia nuestro siguiente destino Agouti donde nos alojaremos en otro gîte para ascender mañana al monte Azourki.
27 de marzo - Agouti / Cumbre del Azourki ( 3650 m)/ Zawita Ahalzal (1635 m) Etapa alpina - 1300 m_ 1300 m_ 7 horas
El Azourki es el Espigüete Marroquí.
El Azourki es un mirador sin igual del Atlas Central, pues nos plantamos delante del gran Wagoulzat que alberga en su cara norte los dos circos glaciares mas grandes de Marruecos y tras de él toda la cresta del Mgoun, bajo nuestro pies el Lago de Izzourar, importante paso de migración de aves como el flamenco Rosa.
Ascendemos por la cara sur para acometer la cresta por su lado oeste y descender por la cara norte donde nos recogerá la furgoneta que nos llevará a Zawita Ahanzal, población de la montaña del Atlas central para pasar noche en Albergue. De camino podremos contemplar la impresionante cara norte del Aroudan (3200 m). Aunque todos conseguimos llegar a su antecima, el guía no nos animó a llegar a la cima (bueno nos dijo que esa era la cima, cuando no lo era) porque había hielo y no llevábamos cuerdas para encordarnos. Así que sólo los más agerridos alcanzaron la cumbre.
28 de marzo - Zawita Ahalzal / Circo de Taghia/ Tabat.
Este día sin duda estuvo mal planificado. Dejándonos llevar por los consejos de nuestro guía, según el cual no nos podíamos bañar, ni había gran cosa que hacer en este paradisíaco lugar, decidimos por unanimidad salir temprano y volver al gîte para comer. De esta forma podríamos tomar el minibús (bueno una furgoneta), y volver a Zawita Ahalzal para partir desde allí al día siguiente y descontar estas dos horas de trayecto al ya de por si largo viaje hasta Essaouira.
En el circo de Taghia confluyen los 3 cañones mas grandes de montaña del Atlas, los famosos Akkas de Taghia y sus enormes torres de caliza de mas de 600 metros paraíso de los escaladores mas aventureros de estos lares.
Para nuestra sorpresa, dadas las pocas expectativas que albergábamos sobre el paraje, el paseo fue muy agradable y la garganta era accesible e incluso te podías bañar. El haber concertado la comida en el gîte nos impidió disfrutar de este precioso lugar como nos hubiese gustado y todos en general salimos bastante decepcionados de haber pasado tan poco tiempo en un lugar con encanto como este al que probablemente no volveremos en mucho tiempo.
29-30 de marzo – Marrakech/Essaouira
Después de este último gran desayuno, tomamos el minibús rumbo a Marrakech algunos, y los que ya lo conocíamos preferimos optar por visitar Essaouira. Una pequeña ciudad fortificada bañada por el Atlántico y situada a 180 km al oeste de Marrakech. Essaouira fue declarada patrimonio de la humanidad en 2001 y tradicionalmente ha recibido nombres como La perla del Atlántico o La Bella Durmiente. En el mercado se puede comprar pescado fresco y degustarlo allí mismo
Pero sin duda lo más destacable de Essaouira son sus espectaculares atardeceres. Por los que mereció la pena las interminables horas de viaje en autobús. Cómo una imagen vale más que mil palabras aquí os dejo algunas, gentileza de uno de los integrantes de la excursión.
Un final estupendo para nuestro viaje por Marruecos, donde siempre sientes ganas de volver.
31 de marzo – Essaouira/Marrakech / Casablanca /Madrid
Desayuno. Volvemos a tomar el autobús de regreso a Marrakech y después a Casablanca, donde tomaremos el avión de vuelta a Madrid.