RESUMEN DEL REVENTÓN
El autobús llegó sin novedad al aparcamiento de Cotos, donde iniciamos la marcha a la hora prevista (alrededor de las 10h). Caminamos por la carretera dejando a la derecha la venta Marcelino y cogemos el camino que lleva al Centro de Información, para a continuación llegar al puesto de control de los vigilantes del parque de Cotos.
Continuamos por la pista hasta llegar a un depósito de agua y un poco más adelante cogemos un sendero hacia la derecha. Avanzamos por este sendero hasta llegar a una bifurcación donde un cartel de madera indica hacia la derecha el camino a la laguna de los Pájaros, que cruza el arroyo de la laguna grande por un paso de madera.
Comenzamos a subir por un sendero pedregoso y empinado hasta llegar a otro cruce en el que también tomamos el sendero de la derecha. Seguimos la marcha y una vez alcanzado el punto más alto de la loma, comenzamos a bajar hacia un prado con lagunillas.
Atravesamos el prado, comenzando el camino de subida y continuamos avanzando hasta que dejamos a la derecha la laguna de los claveles, desde donde se divisa con claridad la cresta de los Claveles. Seguimos camino y, tras una serie de subidas y bajadas, llegamos a la meseta donde se encuentra la laguna de los Pájaros. Bordeamos la laguna por el lado izquierdo y tomamos un sendero a nuestra izquierda que comienza a bajar hacia el puerto del los Neveros (2.094 m), que enlaza con la línea de cumbres.
Una vez alcanzada la línea de cumbres, disfrutamos de unas magníficas vistas del valle del Lozoya (a la derecha) y de La Granja (a la izquierda). Retomamos la marcha, atravesamos el puerto de los Neveros, subimos hasta el alto de idéntico nombre (2.136 m) y nos dirigimos, tras salvar algún repecho, al collado de Hoyo Poyales. En este trayecto hemos dejado a nuestra izquierda un muro de piedras con restos de trincheras de la guerra civil.
Dejando a la derecha el collado de Hoyo Poyales (2.021 m), comenzamos la ascensión hasta el alto del Morete (2.131 m), de camino vamos encontrando nuevamente restos de la guerra civil. Dejado atrás el alto y tras salvar un repecho, comenzamos a bajar directamente hacia el puerto del Reventón (2.038 m), por el que pasa el antiguo camino que unía Rascafría con La Granja. En este puerto es donde confluyen las dos rutas previstas en la excursión, de modo que, una vez alcanzado, nos sentamos a reponer fuerzas junto al muro de piedras que demarca este paso.
Una vez nos hemos despedido de los compañeros que toman la variante que desciende a Rascafría (donde les espera el autobús que luego se dirigirá a Navafría para recoger al resto de excursionistas que realizan la alternativa más larga), continuamos hacia el Norte dejando a la izquierda el muro de piedras y enseguida alcanzamos la cumbre del Reventón (2.079 m), en la que encontramos un vértice geodésico.
Seguimos por el cordal dejando la cerca de piedras a nuestra izquierda y vamos perdiendo altura progresivamente tras salvar algunos collados, hasta que, en un momento dado, divisamos a nuestra derecha un muro de piedra (perpendicular a la cerca de piedras que venimos siguiendo) que se dirige hacia el collado de La Felecha. Este cruce fue el único punto problemático de la ruta, pues hubo un grupo que paso de largo y continuo de frente en dirección Segovia. El despiste no supuso ningún contratiempo pues, con buen criterio, el grupo decidió desandar los pasos dados y regresar por camino conocido al puerto del Reventón (en lugar de continuar hacia Navafría), para de allí bajar a Rascafría donde llegaron a tiempo de coger el autobús.--
Giramos pues a la derecha siguiendo la valla de piedras hasta alcanzar el collado de La Felecha, donde tomamos un piscolabis en un prado que parecía estar puesto allí a tal efecto. Una vez repuestos, sin perder de vista la valla, comenzamos la empinada subida hacia La Felecha (2.077 m) donde encontramos otro vértice geodésico. Nos tomamos unos minutos para admirar la magníficas vistas el valle del Lozoya.
Dejando la cerca siempre a nuestra derecha, descendemos hasta el puerto de las Calderuelas y continuamos nuestra travesía alcanzando enseguida el puerto de Malagosto, dejando un alambre de espino a nuestra derecha. Desde el puerto de Malagosto avanzamos hasta divisar un cortafuegos que remonta hacia la izquierda de la valla de piedras en que se ha convertido la alambrada que veníamos dejando a nuestra derecha.
A partir de aquí, comenzamos progresivamente a ganar altura y, tras atravesar la meseta de los Pelaos, nos dirigimos hacia el S.E. continuando por el cordal hasta alcanzar Peñacabra, donde nos tomamos un tiempo para disfrutar de las vistas de la parte norte del valle del Lozoya.
Desde Peñacabra tomamos dirección N.E. y una vez atravesado el Alto de Porrinos (2.174 m) bajamos hasta el collado que precede al Nevero. En el camino de ascenso hacia la cumbre del Nevero (2.209 m) volvemos a encontrar restos de la guerra civil y, ya en la cima, nos encontramos también un vértice geodésico y podemos divisar a lo lejos el embalse de la Pinilla.
A partir de aquí, iniciamos el largo camino de bajada en el seguimos encontrando restos de la guerra civil. Una vez atravesado el Alto del Puerto (2.000 m), descendemos por un camino empinado y pedregoso hasta el Puerto de Navafría, final de nuestra ruta y donde nos espera el autobús.
Para concluir, comentar que el tiempo fue muy apropiado para la práctica del senderismo, el día transcurrió en su mayor parte nublado pero con mucha luz, conjunción de factores que por un lado hizo que los 29 km de ruta se nos hicieran cortos y cómodos de andar, y, por otro, nos permitió disfrutar de las impresionantes vistas de las cumbres (algunas de ellas nevadas) y del siempre espectacular valle del Lozoya.
Se cumplieron los horarios, finalizando la ruta todos los excursionistas antes de las nueve horas previstas; es más, un grupo bastante numeroso rebajo este tiempo en una hora y llegó al destino transcurridas ocho horas.
