A.D. Grupo de Montaña PEGASO
BTT
Camino del Cid I y P.N. Hoces del Alto Ebro y Rudrón
28 de abril - 2 de mayo 2023
Como hace un año, el G. M. Pegaso hemos vuelto a la provincia de Burgos para hacer una nueva ruta ciclorrutista, en esta ocasión visitando el P. N. Hoces del Alto Ebro y Rudrón y realizando las primeras etapas del Camino del Cid.
Viernes, 28 de abril.
Al ser una ruta en línea de cuatro días nos encontramos con el problema de cómo llegar al punto de inicio y cómo volver a nuestras casas desde el final de la ruta.
Finalmente se decidió alquilar una furgoneta con un remolque para las bicicletas a la empresa Bus Duratón, que recogió a los participantes en Peñaranda de Duero hacia las 20:00 horas y los llevó hasta la Residencia de Sedano, llegando a las 22:35 horas, un poco más tarde de lo previsto.
Se descargó todo deprisa y corriendo para que la gente pudiera pillar algo de cena en el bar de al lado, que ya estaba a punto de cerrar.
Dos de los participantes, Luis Cano y el coordinador, llegaron a media tarde al albergue en bicicleta, uno desde Aguilar de Campoo y otro desde Frómista. También hubo una participante, Susana Ruiz, que llegó en su propio coche.
La participación fue de quince personas (9 hombres y 6 mujeres). Destacando la presencia de dos nuevas socias del club, Irene y Lucía, ambas expertas cicloturistas.
Sábado, 29 de abril.
Ante las previsiones de tormentas para primera hora de la tarde, se decide no hacer la ruta larga, que pasa por Orbaneja del Castillo, y hacer la ruta corta. Al ser circular, no tuvimos que llevar las alforjas.
Tras un espléndido desayuno en la Residencia, antes de las 9:00 nos ponemos ya en marcha saliendo en bici desde la misma Residencia, cruzando Sedano y haciendo la primera parada al final del pueblo junto a la casa y la estatua del escritor Miguel Delibes.
Nuestra siguiente parada será Covanera, ya en la N-623, haciendo una visita breve al cercano Pozo Azul.
Seguimos por la N-623, en el valle del Rudrón, hasta el siguiente pueblo, San Felices, donde empezamos una fuerte subida que nos llevará al páramo de la Lora y luego a Sargentes de la Lora, donde se encuentra el único Museo del Petróleo que hay en España. Había la opción de hacer una visita guiada un poco larga al Museo, pero pensamos que es mejor ir a ver algunos de los pocos pozos de petróleo que han quedado, ahora ya protegidos, convertido en B.I.C.
Desde allí, nos dirigimos al Mirador de la Lora en el límite provincial de Cantabria y Burgos, desde donde se tiene una vista privilegiada del valle del Ebro a nuestros pies. Continuamos nuestro recorrido por el páramo hasta Valdeajos donde empezamos un bonito descenso que nos llevará hasta el valle del Rudrón pasando por tres pueblos antes de llegar a las 13:30 horas a Bañuelos del Rudrón, el pueblo del coordinador, donde hacemos una parada en el bar/Sociedad para tomar un refrigerio. Encontrándonos con la grata sorpresa de que un vecino del pueblo, Gaizka, nos ofrece una lata de anchoas bermeanas ROYO (una de las mejores marcas), de las que damos buena cuenta.
Después hacemos una visita al pueblo y a las 15:30 horas seguimos ruta por una carreterilla tranquila en el bonito valle del Rudrón. Haciendo otra parada en uno de los bares de Tubilla del Agua, ya de nuevo en la N-623, y finalizando la ruta en Sedano hacia las 17:00 horas, después de un recorrido de 70 km.
Al final las previsiones de tormenta fallaron y no llovió.
La cena la hicimos en el comedor de la Residencia a las 20.30 horas.
Domingo, 30 de abril.
Después de otro espléndido desayuno en la Residencia, a las 9:00 horas estamos ya en marcha saliendo por una carreterilla que va remontando el vallejo del río Sedano y después por pistas de tierra en una zona paramera que nos llevan hasta el Monumento a Félix Rodríguez de la Fuente. Desde aquí, empezamos el descenso a Poza de la Sal haciendo una parada para visitar el castillo de los Rojas, encaramado en un peñasco sobre el pueblo y que servía para controlar la zona de la Bureba.
Poza de la Sal nos recibe con un ambiente festivo y de jolgorio con las calles llenas de gente y charangas, el motivo es la celebración del Festival Nacional de Charangas. Es la excusa para quedarnos un poco más de lo previsto y unirnos durante un rato a la fiesta.
A la salida de Poza de la Sal cogemos la vía verde del Mediterráneo que nos llevará por un terreno fácil hasta Sotopalacios (uno de los mejores sitios donde degustar la morcilla de Burgos), pasando cerca de varios pueblos pequeños y cruzando casi al final la sierra de Ubierna. En este tramo Meme sufrió dos pinchazos casi seguidos en la rueda trasera. En Sotopalacios nos acercamos a ver por fuera el castillo del siglo XV, ya que es de propiedad privada. Aquí se supone que se encontraba la casa solariega de la familia del Cid.
La siguiente parada será ya en Vivar del Cid, acercándonos al Molino del Cid, donde nos recibe Javier, el encargado de dar los Salvoconductos y un gran conocedor de la figura del Cid, dándonos una charla muy animada sobre el Camino y el Cid. En este punto se encuentra la Legua 0 del Camino.
Desde aquí seguimos por la carretera N-623 hasta coger unos carriles bicis por los que entramos en Burgos, llegando los últimos participantes al hostel Trovadores a las 20:15 horas después de 82 km.
La cena la hicimos en uno de los numerosos bares del centro de la ciudad.
Lunes, 1 de mayo.
Salimos del hostel a las 8:30 horas en dirección al centro, buscando algún sitio donde desayunar, al ser un grupo numeroso es difícil encontrar un sitio donde nos atiendan a todos y nos dividimos en pequeños grupos, lo que hace que se alargue más de la cuenta el tiempo dedicado al desayuno.
Después fuimos visitando los distintos hitos relacionados con la figura del Cid que se encuentran en la ciudad de Burgos (Iglesia de Santa Águeda, Catedral, Arco de Santa María, estatua ecuestre del Cid) todo ello amenizado con historias y lecturas del “Cantar de mio Cid” realizadas por David Aguilera, saliendo de Burgos a las 10:30 horas.
Desde aquí nos dirigimos por carretera, siguiendo la ruta del Camino del Cid, hasta el cercano Monasterio de San Pedro de Cardeña, donde hacemos otra parada. Éste es un lugar importante en la vida del Cid ya que fue aquí donde dejó a su mujer y sus dos hijas antes de irse al exilio.
Seguimos por carreterillas, entre campo de cereal, con pequeñas subidas y bajadas hasta cruzarnos con otro tramo de la vía verde del Mediterráneo en Los Ausines. A partir de aquí, cogemos caminos de tierra que nos llevarán por terrenos rompepiernas con encina carrasca y cereal verde hasta Cubillo del Campo donde hacemos una parada para beber y picar algo en el bar.
La ruta sigue por un paisaje parecido, con encinar y cereal verde, hasta llegar a Covarrubias, una de las poblaciones más bonitas de la provincia de Burgos, a la que dedicamos un buen tiempo para visitar sus principales monumentos (Colegiata con los restos de Fernán González, torreón, muralla,…).
Desde aquí seguimos por una buena carretera, con una subida un poco dura de tres kilómetros, hasta el Alto de Peña Alta (1,078 m), encontrándonos a partir de este momento con amplias laderas quemadas como consecuencia del incendio que afectó a esta zona hace un año.
Y sin más contratiempos nos presentamos en Santo Domingo de Silos, llegando los últimos participantes a las 20.15 horas después de 71 km.
Nos alojamos en el hotel Arco de San Juan, un bonito alojamiento que lleva con mucho cariño Enrique (una gran persona, muchas gracias por todo). La cena la realizamos en el mismo hotel.
Martes, 2 de mayo.
Seis personas del grupo (Luis, David, Sara, Irene, Lucía y yo) decidimos madrugar un poco para ir a la iglesia del Monasterio y escuchar los Maitines (cantos realizados antes del amanecer) realizados por dieciocho monjes durante media hora. Una vez alimentado el espíritu nos dirigimos al hotel para alimentar también el cuerpo, dando cuenta de un gran desayuno.
A las 9:15 horas nos ponemos ya en marcha, desde el mismo hotel, dirigiéndonos por un camino y luego por carretera al desfiladero de la Yecla después de pasar un par de túneles pequeños, situado a menos de tres kilómetros. Hicimos una parada para recorrer a pie el estrecho desfiladero con paredones de caliza gris por una pasarela.
Seguimos por carreterillas por terrenos con subidas y bajadas no muy duras pasando por varios pueblos y haciendo una parada en Pinilla de los Barrueco con tiempo suficiente para tomar un cafecito y hacernos una foto de grupo.
A continuación, atravesamos una zona de pinar con un fuerte descenso que nos lleva hasta Huerta del Rey. A partir de aquí cogemos la carretera BU-925, por un pequeño valle con cereal verde y choperas, hasta llegar a Clunia. La idea era haber visitado el yacimiento arqueológico pero la mayor parte de nosotros llegamos un poco tarde y no nos dio tiempo, sólo lo hicieron tres del grupo (Luis, Sara y Pepe). Hicimos una parada para comer algo y continuamos por carretera camino de Peñaranda parando unos pocos antes en Coruña del Conde, donde se encuentra el monumento al primer hombre que voló en un artefacto, Diego Marín Aguilera.
El grupo fue llegando escalonadamente a Peñaranda de Duero hacia las 16:50 horas, después de 55 km, donde esperaban los coches para poner rumbo a casa después de una visita a la población. Peñaranda es otra de esas poblaciones que bien merece una visita más larga, destacando la plaza con varios Palacios y un rollo medieval, y el castillo en lo alto de un cerro, visible desde la misma plaza.
No todos quisieron volver a la rutina diaria, y tres de ellos (David Aguilera, Luis Cano y Antonio Bañuelos) decidieron continuar el Camino del Cid en sus bicicletas hasta el Puerto de Sagunto y Valencia en una aventura que les llevó un par de semanas más, pero eso ya es otra historia que ha quedado anotada en mi diario :) .
El Salvoconducto que nos dieron en Vivar del Cid nos sirvió de aliciente para conseguir el mayor número de sellos y chapas que iban dando en distintos puntos a lo largo del Camino del Cid, creándose una rivalidad sana entre nosotros.
A destacar la gran ayuda aportada por David Aguilera en la elaboración previa de la ruta y durante la misma. Ha sido el alma mater de que el Camino del Cid saliera adelante, se impregnó del espíritu del Cid para hacernos más amena esta ruta y nos contagió su entusiasmo. Sin duda, sin él hubiera sido muy distinto.
Coordinador: Antonio Bañuelos.
