El sábado 1 de abril fueron llegando los participantes al aparta-hotel IDAFE, a 200 metros de la famosa Playa de las Canteras, las rutas se desarrollaron con total normalidad, aunque los dos primeros días pasamos un calor bastante sofocante para esas fechas, el día 6 salimos hacia La Aldea desde Artenara donde pasaríamos dos noches, para regresar el día 8 de nuevo a Las Palmas donde se dio por concluida la actividad.

 Domingo, 2 de abril

 Quedamos todos los participantes en la recepción del hotel a las 7:50 y nos desplazamos 300 metros caminando hasta la Plazoleta Farray, ya que en la empresa Amanda bus nos dijeron que la guagua no podía parar en el mismo hotel.

En un trayecto muy cómodo de unos 45 minutos llegamos a Agaete donde iniciamos la ruta, el día estaba muy soleado y hacia viento, lo que era bueno para contrarrestar un poco el calor que está haciendo en la isla.

Empezamos la ruta ya subiendo y pronto los más rápidos como siempre empiezan a distanciarse. A medida que vamos subiendo empezamos a ver la isla de Tenerife y evidentemente el Teide, la subida es pronunciada pero el viento la hace amena. En el grupo de cola nos quedamos 7 personas y pronto una chica empieza a rezagarse por lo que hicimos la primera parada de unos 10 minutos tras la cual iniciamos de nuevo la marcha. Ahora ya no tenemos subida y pronto llegamos a la Era de Berbique donde volvemos a esperar por la chica, cuando llega seguimos subiendo y ahora la subida es más pronunciada aún, a la chica le cuesta cada vez más y decido quedarme con ella y su marido para ir subiendo a su ritmo, mientras el calor empieza a apretar.

Seguimos la marcha y los tres hacemos una parada en la zona de asaderos para comer. Al llegar a la degollada del humo decidimos no subir al Pico de la Bandera, (el resto del grupo si lo hizo). Aquí empezamos el descenso y el calor aprieta más todavía, la bajada no es muy pronunciada y la chica se encuentra mejor, seguimos sin parar hasta el albergue que hay en el Hornillo donde tomamos unas Coca Colas fresquitas. Ya el calor está bastante fuerte y cuando estamos llegando a los Berrazales, la chica me dice que no puede más y decido que la mejor opción es quedarnos en el hotel de los Berrazales y que la guagua suba a buscarnos. En este momento otra compañera me llama por teléfono para preguntar por dónde íbamos. Le explico la situación y le digo que hable con la chófer para que suba a buscarnos pero me dice que llame a la empresa para que lo autoricen. Así hago, pero no responde nadie. al final ella llama a su encargado y este se lo autoriza. En la espera se nos unen otros siete compañeros de marcha y nos acercamos hasta la carretera donde nos recoge la guagua. Seguimos hacia Agaete y de camino recogemos al único compañero que hizo la ruta larga invirtiendo un tiempo total de caminata de 9 horas.

El resto del grupo hizo la ruta desde 6 horas los primeros hasta 9 horas los últimos. De vuelta para Las Palmas.

 Lunes, 3 de abril

 Quedamos como ayer a las 7:50 en la recepción y ya la guagua nos estaba esperando en la puerta, así que a pesar del pequeño retraso de los últimos en llegar, salimos pronto. El trayecto de hoy es el más corto y empezamos la marcha a las 8:30 después de repartir emisoras y unas breves explicaciones. El camino empieza al nivel del mar con una ligera brisa muy agradable y después de pasar por debajo del puente atravesamos el campo de fútbol y cogemos una pista que nos lleva por el cauce del barranco, más adelante atravesaremos un cañaveral que nos hace un túnel, una vez que salimos del cañaveral nos encontramos un camión que recogía plátanos atravesado en el camino que tuvimos que bordear y seguimos nuevamente la pista hasta llegar a un sendero que comenzamos a subir para bajar de nuevo hasta coger otra vez la pista.

Parte del grupo se despistó y siguió subiendo por el sendero en la desviación, los avisé por la emisora y esperamos por ellos para reanudar la marcha.

Más adelante llegamos a un antiguo balneario y una fuente de agua ferruginosa cerrada hace años, ahí la pista se vuelve un empedrado bastante pasado por agua y aquí empieza la parte interesante de la ruta con una frondosa vegetación, una corriente de agua, y varias pozas y cascadas. El tiempo sigue fresco y disfrutamos del momento haciendo las fotos pertinentes.

Seguimos por el cauce del barranco cruzándolo en varias ocasiones por unos puentes bastante rústicos hasta llegar al primer punto equipado con cuerdas que pasamos rápido y sin dificultad. Seguimos e inmediatamente después de cruzar el cauce de nuevo nos encontramos el segundo paso equipado con cuerdas donde la roca está mojada y es más largo que el anterior, así que tardamos un poco más.

A continuación empezamos a abandonar el cauce del barranco y subimos por un sendero estrecho y con algunos pasos de ligera trepada que, un poco más arriba baja de nuevo al cauce del barranco, que atravesaremos para empezar a subir de nuevo a la carretera general. La seguimos durante unos 20 minutos y otra vez bajamos al barranco para salir en el balneario, más adelante cogemos el desvío para subir hasta carretería a la que llegamos con un calor de nuevo bastante sofocante, allí nos encontramos con 2 compañeros que pensaban que la guagua nos recogía allí. Después de tomar un refrigerio iniciamos la marcha para llegar en 10 minutos a Moya donde la guagua ya nos espera.

 Ruta muy corta pero muy bonita, hoy era opción única, los primeros tardaron cuatro horas en completarla y los últimos seis. Llegamos a las tres y cuarto a Las Palmas. Una parte del grupo nos fuimos al casco antiguo y otra se quedó en la playa.

 Martes, 4 de abril

 De nuevo quedamos a las 7:50 en la recepción, hoy fuimos de ruta 13 personas, el resto se quedó de turismo, salimos de Las Palmas hacia San Bartolomé de Tirajana con bastante viento y tuvimos una hora y 40 minutos de trayecto.

A medida que nos acercamos a nuestro destino vamos viendo como un mar de nubes se desplazaba desde la parte alta hacia abajo atravesando nuestra ruta, el Cañadón del Jierro. Llegamos al inicio de la ruta y nada más bajarnos de la guagua comprobamos que hacía un viento bastante fuerte que no pudo con nosotros. Como buenos “pegasianos” nos abrigamos bien, hacemos comentarios sobre el fuerte viento y comenzamos la marcha.

 La ruta de hoy tiene bastante trepada, pero la hacemos sin problema y a buen ritmo, la fuerza del viento ha bajado bastante, pero se queda la cantidad buena para que no haya calor. Una vez que salimos del cañadón enlazamos con el sendero que viene el camino de la plata, donde el grupo de cola se divide en dos. se adelantan compañeros y otros cuatro (incluido yo), cerramos la marcha.

Continuamos hasta el Pico de las Nieves, ahora el viento ha aumentado de fuerza y caen gotas de agua de los pinos que golpean con fuerza nuestra cara: Bajando nos cruzamos con un grupo de 6 compañeros.

Una vez en el Pico de las Nieves subimos a un pequeño mirador donde un servidor se quedó sin sus gafas de sol por el viento, de nuevo en el pico de las nieves nos tomamos algo caliente en la furgoneta bar que hay siempre allí y seguimos hacia el pico campanario por el mismo camino que hemos subido. Seguimos descendiendo hasta enlazar con el camino de la plata y nuestra siguiente parada es La Ventana Del Nublo. Después bajamos y en aproximadamente dos horas llegamos a nuestro destino: San Bartolomé de Tirajana.

 El primer grupo tardó seis horas en hacerla y el último ocho.

Miércoles, 5 de abril

 Hoy estamos puntuales todo el grupo y salimos hacia el punto donde nos espera la guagua. Nuestro destino es la degollada de las Palomas a la cual llegamos en una hora y diez minutos. Nada más bajarnos vemos que hace un fuerte viento y caen algunas gotas así que nos dirigimos a una marquesina que hay para ponernos el cortaviento/chubasquero y empiezan a escucharse las primeras quejas y como por arte de magia se van subiendo a la guagua hasta quedarnos ocho valientes para hacer la ruta. Iniciamos la marcha y nos dirigimos hacia La Cruz de Tejeda, el viento es fuerte pero no nos importa, llegamos a La Cruz y nos hacemos la foto de rigor y sobre la marcha continuamos. Poco a poco el día se va despejando y podemos ver nuestro destino, el Roque Nublo, también El Roque Bentaiga y todo El Barranco de Tejeda.

El camino es una ligera subida hasta llegar al cruce por el que volveremos luego. Aquí empezamos a descender hasta La Culata, donde nos tomamos algo caliente y probamos un queque de papaya muy bueno. Seguimos la marcha y comenzamos a ascender hasta tomar el sendero de la circular del Nublo el cual seguimos hasta llegar al emblema de Gran Canaria donde el viento es bastante fuerte. Tras hacernos las fotos pertinentes empezamos el descenso y nos llaman la atención los gritos de una persona a la que el viento había tirado al suelo. En este punto y viendo cómo estaba el día y que ya habíamos visto el punto fuerte de la ruta propuse acortar la misma a lo que accedió la gente, así que bajamos hasta La Goleta. Desde aquí seguimos hasta la presa de Hornos y el campamento del Garañón, donde empatamos con el track y en poco más de una hora ya habíamos llegado de nuevo a La Cruz de Tejeda. Después de tomar las cervezas de fin de ruta y algún café que otro, nos dirigimos al aparcamiento donde nos esperaba la guagua.

 Al final de un día malo se nos quedó un día para mi gusto bueno para caminar teniendo en cuenta el calor que pasamos los dos primeros días.

 Completamos la ruta en 6,5 horas y de 25 kilómetros pasamos a 20.

Jueves, 6 de abril

 De nuevo a las 7:50 estamos todos en la recepción y después de entregar nuestras últimas pertenencias para que nos las guardarán hasta nuestra vuelta el sábado nos dirigimos como todos los días a La Plazoleta de Farray y salimos para Artenara. El chófer coge por un camino para mi gusto muy largo. Nada más bajarnos del bus comprobamos que otra vez tenemos un fuerte viento, empezamos la marcha y el viento va amainando, al final se queda el día muy bueno para caminar (para mí el mejor).

Hoy el día está despejado y tenemos todas las vistas posibles, seguimos nuestro ascenso hacia la montaña de Alta Vista y cuando llegamos al cruce nuestra compañera decide esperarnos en ese punto, con lo cual dejamos las mochilas para subir ligeritos. En poco más de media hora ya estamos arriba y vemos al fondo bien lejos nuestro destino, La Aldea de San Nicolás.

 Explico a los presentes las rutas de mañana y pasado y después de las fotos de rigor iniciamos el descenso hasta el cruce donde nos esperaba la compañera.

Después de un pequeño tentempié donde doy a probar a los presentes las famosas chocolatinas Tirma empezamos el descenso hacia La Aldea, que se hace bastante largo, alternando ráfagas de viento con momentos de calor, aunque no tan fuerte como los dos primeros días.

Los cuatro que cerramos la ruta completamos la ruta en 8,5 horas y los primeros en 6,5 horas. Hay que decir que este tiempo es hasta que llegamos al pueblo, luego tuvimos otros 3,5 kilómetros hasta el albergue.

A estas alturas ya se comenta que son muchos días y que ya se nota el esfuerzo acumulado.

Viernes, 7 de abril.

 Hoy como siempre estaba puntual la guagua esperando, esta vez en la puerta del albergue y pronto partimos hacia la Degollada de la Aldea. En unos veinte minutos habíamos llegado, hoy tenemos dos opciones, Asloas (la montaña de las montañas) y llegar hasta La Aldea por El Lomo del Viso. El grupo se divide en dos; unos optan por El Lomo del Viso y otros subimos Asloas. Al principio vamos por un sendero bien marcado para luego meternos por un andén con mucha piedra suelta.

 La trepada a la montaña no es muy larga, pero si exigente con algún paso de tres.

Hoy tenemos el tiempo bastante caluroso y prueba de ello es el Twix derretido de Dori.

Completamos la ruta en cinco horas y después el grupo se dividió en tres una vez estábamos de nuevo en la degollada, Alguien optó por subir al Lomo del Viso con sus casi 600 metros de desnivel positivo y el resto tomamos un sendero que sale de la degollada hasta La Aldea. Yo nunca lo había hecho, pero lo propuse teniendo en cuenta los comentarios de la noche anterior porque era todo de bajada. No fue buena idea ya que nos tocó recorrer seis kilómetros por carretera hasta el albergue. Poco a poco fuimos llegando, primero el grupo que salió de la degollada, luego llegó una compañera que venía de bañarse en la playa (con muchas ganas, ya que hizo un extra de una hora aproximadamente), y por último el otro grupo que salió de la degollada.

Sábado, 8 de abril

 Hoy es el primer día que no cogemos guagua. Salimos caminando desde el albergue, nos espera una jornada bien calurosa, no son muchos kilómetros, pero si un desnivel importante.

Después del desayuno nos ponemos en marcha los dieciséis.

Dos personas deciden no caminar hoy y se van en guagua para Las Palmas.

Pronto y como siempre los más rápidos empiezan a distanciarse. Tenemos unos dos kilómetros por carretera, pero llegamos rápido al inicio del sendero que nos lleva a la famosa playa de Gui-Gui donde el calor aprieta bastante. Tenemos unos quinientos metros hasta la degollada de Peñón Bermejo, en este punto comienza el ascenso a la Montaña del Cedro con 350 de desnivel y una buenas trepadas, solo 6 suben, son muchos días y ya se nota el cansancio, el resto bajamos hasta la playa por un sendero muy cómodo. El calor sigue apretando, pero hay ráfagas de viento que lo suavizan un poco.

Coordinador: Pedro Pablo Pulido