A.D. Grupo de Montaña PEGASO

Montañismo

Cauterets

11 a 15 de octubre de 2023

Descripción de la actividad:

Al imaginar esta memoria dejé un paréntesis para las líneas de quienes participaron en esta travesía ¿Cómo hacer una memoria completa sin la participación de todos? Con aguja e hilo es más fácil hacer la trama con la que, esta vez sí, me han obsequiado los compis. Varias aportaciones que prácticamente hacen innecesaria cualquier otra mención, pero confieso que no me he resistido a la tentación y también he metido tinta por medio…

Actividad realizada por 24 montañeros, 7 mujeres y 17 hombres, todos federados o con seguros personales o de actividad. Licencias de montaña 20.

Miércoles 11 de octubre

El recorrido no tiene ninguna dificultad especial que reseñar, senderismo

con oportunidad de disfrutar de vistas, hermosos paisajes de bosques de pinos, lirios, azafrán silvestre… cascadas, pastos, lagos y cumbres, pozas… la cabra montesa, rebecos, ardillas, ranas, salamandras…

Tras los pasos y las correspondientes fotografías, poco a poco vamos llegando los doce primeros al refugio de los Ibones de Bachimaña (2.200m).

Iniciamos la recepción, saludo a los nuevos participantes, Miguel y Cipriano, recogida de DNI, licencias y preparación de los aspectos puramente burocráticos.

La salida desde Madrid, accidentada en ocasiones, retrasó el vehículo de algunos participantes que llegaron al límite del horario previsto, en una ascensión al refugio de esas de frontal en “noche cerrada” y bajo un manto de estrellas especial.

La cena, más que correcta, nos deja a los 16 preparados para el descanso. Otros ocho participantes se alojarán esta noche en el refugio de la Casa de Piedra (1.640m)

Jueves 12 de octubre

Grupo del refugio Ibones de Bachimaña:

Son las 8:00 de la mañana y comenzamos a andar, todavía con el recuerdo del cuarto de pollo asado que nos pusieron de cena en el Refugio de Bachimaña, ¡todo un lujo!

Con mucha ilusión llegamos a los embalses, el bajo primero y el alto después. No estamos cansados y las cámaras disparan sin parar, algo que irá disminuyendo según los pasos y las cuestas vayan haciendo mella.

Por buena senda seguiremos subiendo hacia los embalses de Bramatuero, las vistas son impresionantes, hay agua por todas partes. En este punto es ya obvio que todos los participantes del grupo están en perfecta forma física para acometer el recorrido de la travesía y los más nuevos en el Club lo demuestran manifestando u optando por recorridos opcionales más complejos.

Aprovechamos en el refugio no guardado, Cabaña Bramatuera (2.490m), a echar un trago y desde aquí un grupo continuará por la ladera Oeste del embalse realizando pequeños subibajas en terreno pedregoso e incluso descompuesto en ocasiones, hasta alcanzar el collado del Letrero (2.645m)

El otro grupo realiza el recorrido opcional y sigue ascendiendo hacia los objetivos: el Grand Pic D´Arratille (2.898m) primero y el Pico de Las Neveras (2.891m) después de traspasar por el Collado Alto de Batanes (2.800m). Son tramos en los que nos divertiremos mucho, usaremos manos y pies y en alguno perderemos la dignidad utilizando el culo como punto de equilibrio.

Tras la parte más técnica de la etapa de hoy llegaremos el collado de Letrero, zona común con el resto de las opciones. Aquí iniciaremos una bajada que nos servirá para recuperar fuerzas antes de atacar el col des Mulets, que a más de uno se le atragantará. Cruzado este y ya metidos en el GR11, bajaremos hasta el refugio con las vistas impresionantes del Vignemale, su glaciar Norte y su circo.

Risas, cervezas y en cierto modo, un poco de ansiedad reinará entre quienes ya hemos llegado, deseando ver al grupo que salió de Casa de Piedra ya que vamos viendo que poco a poco el sol cae y la hora de la cena se acerca. Por fin los reconoceremos, justo antes de entrar en el circo, ya sin sol y con las ultimas luces del día. Alegría, tranquilidad y emoción para terminar esta fantástica jornada.

Grupo del refugio Casa de Piedra:

Aún no ha amanecido cuando salimos del refugio de Casa de Piedra camino de Bachimaña los ocho valientes que hemos dormido en el refugio en Panticosa. Concretamente 530 metros más abajo que el resto de la compañía.

Vamos en su busca, y avanzamos a buen ritmo. En aproximadamente una hora y media llegamos al refugio de Bachimaña y por supuesto allí no queda ni un alma, así que tras un breve descanso vamos en busca del resto de compañeros que nos llevan la delantera.

Rodeamos el embalse de Bachimaña Alto, bastante vacío, y giramos hacia el Este para continuar ascendiendo sin excesivo esfuerzo.

Superado el embalse de Bramatuero Bajo encontramos al único participante del otro grupo que nos ha esperado, y que se une a nuestro grupo.

Los nueve continuamos avanzando, haciendo una breve parada para echar un vistazo a la Cabaña Bramatuera, y continuando desde ese punto por un camino que en muchas ocasiones se pierde, aunque en prácticamente la totalidad del recorrido se intuye.

Ya en la ladera sur del Arratille, nuestros compañeros nos informan por radio de que nos están viendo, y eso nos anima a continuar, pues tenemos la impresión de que les tenemos bien cerca.

La ascensión no es difícil, pero sí entretenida. No se avanza rápidamente, y tardamos mucho más de lo esperado en ascender al primer pico Arratille, dejando las mochilas en su base para subir por una pequeña chimenea ideal para tirar piedras (la próxima vez yo llevaría casco). Dos participantes que iban a esperar abajo mientras el resto culminábamos el pico, deciden marchar hacia el collado para evitar ser bombardeados.

Tras las fotos de cumbre, todos les seguimos. Nuestros compañeros del primer grupo hace rato que han pasado por el pico que tenemos enfrente y al que nos dirigimos, el Pico de las Neveras.

Buscamos y encontramos nuestro camino por la sencilla cresta, y algún participante me confiesa que es su primera cresta… excelente estreno.

Comemos algo en el pico de Las Neveras disfrutando de las impresionantes vistas, y los compañeros que van delante de nosotros nos informan por radio que, según lo informado por los guardas de los refugios, la bajada por el collado del Letrero también es entretenida, así que procuramos ponernos en marcha sin dilación, pues aún quedan horas para acabar la jornada.

Bajamos con cuidadito y buena letra hasta cruzar un marcadísimo camino que enlaza la Alta Ruta Pirenaica o HRP (en el Norte del valle) con el GR11 (en el Sur), y terminamos nuestras andanzas siguiendo obedientes las marcas de la HRP a través del Col des Mulets (2.591m).

Aquí ya vamos a toda velocidad, pues la cena es a las siete, y se nos ha hecho tarde.

Poco a poco vamos llegando al refugio y como no hay duchas nos vamos directos a cenar, y a charlar con los amigos a los que no hemos visto en todo el día. Coincidimos casi todos en nuestras opiniones: una ruta preciosa, montañera, poco senderista.

Tras la charla en la cena se decide el cambio en las opciones del día siguiente. Después, conversaciones y observación del denso manto de estrellas, las siluetas del macizo del Vignemale y a dormir para prepararnos a lo que nos deparará la ruta de mañana.

 Viernes 13 de octubre

Amanece un día despejado y las rutas previstas para hoy ofrecen varias posibilidades. La ruta normal es realizada por un grupito de 11 personas y llegará al Refugio Wallon-Marcadau siguiendo la HRP por el collado de los Mulos y el de Aratille.

Para el resto se ofrece otra opción con posibilidad de ascender a cumbres y sin repetir el collado de los Mulos por donde todos habíamos pasado el día anterior.

Se trata de entrar por el circo de Chabarrou y superar el estrecho collado que se abre entre el Pico de Chabarrou Nord (2.925m) y el Pico Alphonse Meillon (2.930m) para volcar al valle de los lagos de Aratille uniéndose allí a la HRP.

En descripciones de esta ruta habíamos leído que tras superar el collado había que subir al Pico Alphonse Meillon por una chimenea que presentaba un paso de escalada de grado III- dejándonos con la incertidumbre de si sería adecuado para pasarlo con las mochilas de la travesía.

Finalmente, solo 10 personas decidimos intentar esta opción, que además ofrecía la posibilidad de hacer algunos picos extra adicionales: el pico Peyrot (2.703m) y el Isarderes (2.724m), desviándose en el lago de Chabarrou, y el pico Chabarrou Nord desviándose en el collado. De hecho, la idea inicial de la mayoría de los que partimos siguiendo esta ruta, era tomar una alternativa subiendo al collado Peyrot y desde allí bajar al valle de Marcadau por el valle Pouey Trenous que, viendo camino marcado en los mapas, no presentaba la dificultad comentada más arriba del paso de escalada. 

Con esa idea partimos del refugio de Oulettes de Gaube con los primeros albores de día tras descender apenas 1 km por el valle de Gaube tomamos a la izquierda un casi imperceptible camino que va remontando hasta el lago de Chabarrou. Aquí se replantea la ruta y todos decidimos intentar el paso por el pico Alphonse Meillon y el supuesto paso de escalada. Sin embargo, dos compañeros optan por subir previamente al pico Isarderes dejando las mochilas junto al lago, pero llevando emisora para estar comunicados. Sin mochilas, la subida a este pico se hace rápida resultando muy interesante presentando una cresta cimera sin dificultad, pero con mucho ambiente montañero.

Tras descender al lago y recuperar las mochilas estos dos compañeros suben al collado donde se reúnen con parte del grupo que está esperando a los que han intentado llegar al pico Chabarrou Nord.

No vieron claro atacarlo por la cresta y lo han hecho descendiendo un poco por la cara oriental buscando pasos menos expuestos.

El estrecho collado de Chabarrau es un paso de viento y no resulta muy cómodo para esperar mucho rato, así que decidimos adelantar tiempo y asomarnos a ver como se presentaba la chimenea y el paso de escalada. Vemos algunos hitos y la posibilidad de hacer una travesía en diagonal por un vasar de la cara occidental del pico Alphonse Meillon y llegar al track de bajada evitando así tener que pasar por la chimenea.

Informamos por las emisoras de esta alternativa mucho más factible, y alcanzando el track de bajada dejamos allí las mochilas para atacar la cumbre del pico sin más dificultad que buscar los pasos más firmes para evitar hacer rodar piedras.

La bajada hasta encontrar el camino de la HRP es por una pedrera muy inclinada donde hay que cuidar los pasos, pero sin ninguna dificultad añadida, no hay camino y los hitos son escasos, pero el recorrido a seguir es evidente, y más pronto o más tarde vamos alcanzando el sendero de los lagos de Arratille que ya cómodamente, y en apenas hora y media más, nos deja en el refugio Wallon, punto final de la etapa de hoy. Este refugio toma el nombre de Édouard Wallon, especialista de los Pirineos del siglo XIX. Situado geográficamente en la HRP (Haute Route Pyrénéenne/Alta Ruta Pirenaica) permite recorrer toda esta magnífica región.  

El acceso es fácil y sin mayor riesgo incluso en invierno. Situado en el cruce de 4 valles propone una montaña fácil en muchas de sus rutas y es punto de salida idóneo para numerosas ascensiones y excursiones, destacando el Cambalès (2.968m), puerto del Marcadau, travesía hasta el refugio de Ilhéou por los lagos del Embarrat, travesía hacia Oulettes de Gaube por Aratille y el paso de Mulets, hacia el refugio de Respomuso por el paso de la Fache, hacia el refugio de Bachimaña por el puerto del Marcadau, y finalmente la Grande Fache (3.005m), punto culminante del valle. En cuanto a los numerosos lagos que nos rodean, 29 en total, y a los 3 torrentes pirenaicos.

Y también, en otro opcional, “triple salto mortal con tirabuzón”: Té, tostadas, mantequilla, azúcar, mermelada y miel. Sueño y ganas.

Empezamos nuestro objetivo de hoy “disfrutar en el monte :-)”

Subida mantenida, ¡Cuidado! ¡esta piedra se mueve y esta otra también, piedra!

A nuestra derecha, un hito que nos marca la subida al Pic Chabarrou Nord que, tras una canal trepada, conseguimos llegar hasta su cima. Abrazos, sonrisas y viento.

Destrepe deshaciendo nuestros pasos.

Para llegar al collado de Chabarrou, decidimos trazar una travesía por la base de sus paredes.

Una vez en el collado, toca subir el pic Alphonse Meillon, una diagonal ascendente nos deja en su canal ancha pedregosa. Subimos. ¡¡Que vistas!!

 Ahora toca bajar hacia el valle Marcadau. Sale el sol, comemos y seguimos. Pinos, ovejas, ducha fresca y génépi.

 Sábado 14 de octubre

Actividad opcional:

Amanece lloviendo y el pronóstico del tiempo no era halagüeño, prometiéndonos lluvias a partir de mediodía.

 

Madrugamos y con las primeras luces, muchas nubes y temperatura fresca, un grupo de 14 de nosotros comenzamos a andar con idea de realizar la opción larga. El bosque de alrededor del refugio presenta árboles espectaculares en los que nos deleitamos. Tras una cómoda subida nos encontramos con el lac Nere (2.310m), encerrado entre paredes y liso como un espejo por la calma del viento que tenemos.

Con tantas nubes y con el pronóstico de tiempo tan desfavorable, decidimos subir sólo al último de los tres picos propuestos en la actividad para poder realizar luego el descenso por otro valle e intentar llegar al refugio secos.

Dejamos atrás el desvío para el primer pico, continuando hasta el lac du Portet (2.420m), en el circo que cierra el valle. Subiendo hacia el Oeste y alzándonos, ya sin sendero, hasta las laderas del col de Bassia camino de la cumbre del Soum de Bassia (2.758 m) tenemos la suerte de contemplar un rebaño de machos adultos y subadultos de cabra ibérica (Capra pyrenaica) (bouquetin en Francia) Estos animales nos sorprenden por la tranquilidad con que se mueven ante nuestra presencia, posiblemente porque los de

mayor edad sean animales capturados en la sierra de Madrid en los últimos años y soltados en Marcadau, para repoblar el parque nacional.

En la cumbre del pico, nos hacemos una foto de grupo bajo nubes amenazantes que, al final, no descargaron más que algunos momentos de txirimiri en toda la actividad.

Bajando del pico, nos volvemos al lac de Pourtet (2.420m), donde admiramos el bonito istmo que se adentra en él, y descendemos por el valle del mismo nombre, con varios lagos encadenados, preciosos entre rocas y praderas. A destacar, por lo inusitado de la época de floración, la presencia de algunas matas de rododendros con nuevas flores, posiblemente como segunda floración debido a las temperaturas de este largo “verano” que están soportando. Al rato de marcha, llegamos a la altura del precioso bosque mixto de pinos, abetos, abedules, serbales… en el que la senda desciende bastante inclinada hasta el fondo del valle de Marcadau, dónde tomamos la pista que, en una hora, entre bosques y praderas, nos devuelve al refugio. Como curiosidad y ya cerca del refugio, los pastores recogían a las ovejas y a un par de corderitos recién nacidos, ayudados por el conocido perrito que amenazaba y mordía alguna de las pantorrillas de los montañeros Pegasianos.

Actividad propuesta:

El sábado comenzó con cierta incertidumbre, dada la alta probabilidad de lluvia. La propuesta del coordinador fue redistribuir las rutas a realizar ese día, para nuestra seguridad, por si había que darse la vuelta. Algunos decidimos hacer una ruta corta, con sustancia, que nos permitiera llegar pronto al refugio Wallon y así evitar mojarnos en la medida de lo posible.

Una actividad que, viendo la lluvia, roca mojada y una húmeda y fresca mañana, rápidamente tornó en preguntas ¿qué hacemos? ¿hasta dónde? Vamos al “lago Negro” y vemos como sigue el día. Los seis participantes ponemos pasos por un camino perfecto hasta alcanzar el lago y de nuevo, cinco continuamos, pero acometiendo un recorrido más practicable, que en los relatos catalogan como ascensión fácil.

Nuestra referencia elegida fue el pico Bernat Barrau (2.793m), cumbre prominente de esta zona y que pronto demostró ser una magnífica ruta de unos 11 km y unos 1.000m de desnivel.

Tras 4 km después del lago Nere viramos al Oeste para alcanzar por la derecha el lac de Bassia (2.490m). Unas vistas preciosas nos esperaban en el promontorio donde reponemos fuerzas y abrigamos. La subida y bajada al pico, previa valoración grupal de las condiciones, le dieron el punto disfrutón al día. Pasos sobre rocas que en ningún caso presentaron dificultad pero que aconsejan mucha prudencia en la bajada por la humedad y gotas con las que Zeus (máximo exponente de este elenco de dioses, dueño y señor de las nubes, la lluvia y los truenos) nos estaba obsequiando.

Y aunque parecía no llegar nunca, llegó J por fin en la cima, abrazos, foto panorámica para la web de Luis y el típico descanso y deleite de estos enclaves para el éxtasis.

Poco a poco decidimos la bajada hacia el lago de nuevo. Esta vez preferimos bordearlo por la derecha para no volver sobre nuestros pasos y con paciencia y la sonrisa que estos días dejan tras el esfuerzo, la charla, las fotos de grupo y la tensión de algún “culo al suelo” vamos recuperando el buen camino en el Lac Nere para unos kilómetros más abajo, cerca del refugio, disfrutar de una comida tranquila entre amigos y compañeros. Poco después, en breve, alcanzamos la vista del refugio Wallon y a nuestros compañeros de actividad que ya consumen el líquido que pensábamos reponer. Sin duda, una ruta muy recomendable.

Una duchita caliente, una clase de yoga para recomponer el cuerpo y unos momentos de risa y charleta entre todos hasta despedir el día, la cena y algunos juegos en el refugio ponen la guinda a la jornada.

 Domingo 15 de octubre

La última jornada de la actividad “4 valles” comenzó, desde el refugio francés de Wallon, con suave lluvia y tras el desayuno y las prisas correspondientes con motivo de la preparación del material.

La meteorología fue favorable a lo largo del día, permitiéndonos disfrutar de una temperatura agradable sin que hubiera precipitaciones, con nubes bajas que fueron elevándose a lo largo del día, propiciando espectaculares panorámicas del fenómeno llamado “panza de burra” entre las cumbres que circundan el valle desde el que se inició la última jornada.

Una vez todos los montañeros estuvieron preparados para partir, aproximadamente las nueve de la mañana, se comenzó a ascender el valle que dirige al collado que constituye el port de Marcadau (2.541m) que se encuentra junto a los picos denominados pic Falisse (2.765m) y pic Muga Nord (2.650m).

La ascensión discurrió por un camino perfectamente marcado sin otra compañía que las magníficas vistas que proporcionaba la amplitud del valle decorado con las nubes bajas, el esfuerzo y conversación de otros compañeros.

Tomamos un descanso a medida que alcanzábamos el port de Marcadau (frontera hispano-francesa), y comenzamos el último descenso de la actividad “4 valles”. Suavemente, por un camino perfectamente marcado, disfrutamos de las vistas del embalse de Bramatuero Bajo (2.290m) a la izquierda, y el lago e ibones de Pecico.

Durante el transcurso del descenso se atraviesan riachuelos continuos que desembocan en los mencionados ibones y embalses, alcanzando finalmente el refugio español de Bachimaña. En esta última parte de la ruta, a medida que se desciende desde el refugio de Bachimaña, las diferentes cascadas se precipitan en la parte izquierda al camino, proporcionando unas imágenes espléndidas entre bosques de abetos, pinos silvestres, servales y otras variedades autóctonas.

Finalmente, el grupo completo alcanzó los Baños de Panticosa aproximadamente sobre la una y media de la tarde, aprovechando para disfrutar de las merecidas cervezas, o “martinis”, antes de la despedida final de la actividad, y sin ninguna incidencia en todo el recorrido.

Tras la limpieza y el cambio de ropa, los merecidos abrazos y despedidas (alguna lagrima imaginé ver).

 

A modo de resumen

Podríamos decir que “con viento en popa a toda vela no corta el mar sino vuela…” y es que cuando un grupo de montañeros, como el de estos días, se reúne para disfrutar de nuestra afición, de la naturaleza, del esfuerzo, los consejos, las risas, pensamientos e ideas; que cuando los refugios, alojamientos, alimentos y guardas proporcionan lo necesario; cuando la actividad que realizamos es novedosa o poco recordada para la mayoría y fundamentalmente cuando la meteorología nos permite gastar la energía piedra a piedra, paso a paso, sin la preocupación de que los riesgos puedan no ser asumibles, en esos días, siempre haces cimas diciendo “así se las ponían a Felipe II”.

Creo que ha sido una de las actividades que más he disfrutado de coordinar en los últimos años. Me he divertido, me habéis ayudado enormemente, me habéis manifestado vuestro agradecimiento llevándolo en ocasiones al halago y sí, me quedo con ganas de repetir y repetir y volver a repetir.

Gracias por toda la colaboración y animo desde cada rincón de nuestro Club. Es de gran ayuda.

Agradecimientos:

.

Unos ejemplos de los vuestros (y que no son todos los recibidos):

  • ¡Un placer…! ¡Muchas gracias por todo! ¡Una gran ruta! ¡Y maravillosos días con vosotros!
  • Super encantad… conocido y de compartir el finde con un grupo tan fantástico. Seguro que compartimos más actividades. Me ha hecho mucha ilu…
  • ¡Muchas gracias por la super actividad! ¡Ha estado más que perfecta!
  • Compartir estos momentos con la familia Pegaso es algo maravilloso. Gracias por una excelente coordinación, por cuidarnos tan bien y estar pendiente de que todo fluyera y porque gracias a… me he sentido muy cómodo/a y segura/o.
  • Un abrazo para tod@s y que continúen más momentos de estos que son un placer poder disfrutar.

 

Final:

La vida está hecha de días que no significan nada y momentos que significan todo. En un país plagado de expertos en generar distancias, hemos confluido un grupo de personas obsesionado, por lo contrario, por compartir, disfrutar e incluso jugar (¡Ay! canario, prepárate para la próxima que no vas a tener tan fácil ganarnos a Eva y a mí. Estudia que allá vamos ????).

Gracias a toda/os por vuestra disposición y siempre agradables sonrisas.

Gracias por vuestras líneas (que siempre espero impaciente) Vanesa, Esther, Luis Fabres, Miguel, Iván, Luis Cano y Javiti (lo siento, no podía pedir líneas a todas/os).

Gracias por toda la ayuda en la elaboración para la coordinación de la actividad a Esther, Luis Cano, Pedro Cristóbal, Mendikat, Wikiloc, Pirineodeluis y cualquier otra ayuda encontrada en redes o no, que pueda olvidar, sorry.

Vuela, vuela, amigo montañero, compañeras/os y cimas nos esperan.

Gracias por todo y, sobre todo, por hacer que todo fluya como lo que es, un grupo, un Club, compañeros dispuestos a compartir... vida. De la vida también los chascos, risas, las advertencias, las opiniones.

Gracias por vuestra siempre bienintencionada forma de ser. Nunca la viví de otro modo. Nos vemos, seguro, pronto.

Estoy mú contento con tó ????.

Un fuerte abrazo también para ti, amiga/o lector/a.

Coordinador: Jose Luis Sanz Zapata.

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Centro Cultural Eduardo Chillida (mapa),
C/ Arroyo Belincoso, 9 - 28030 Madrid (metro Vinateros)
 
HORARIO:
18:30h. a 21:00h. 
(Sólo días concretos, cuando hay reunión presencial) 
 
 

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