Viernes 6, de diciembre
Tras desayunar a las 7:00 de la mañana, salimos hacia el punto de partida que se encontraba a unos 15 minutos de nuestro alojamiento. Este día nos esperaba la subida al refugio de Miramundos, al pico Mágina (el más alto de la provincia de Jaén) y a la peña Jaén. Todos los compañeros realizamos la opción A de las rutas, ya que fuimos agraciados con un día de buen tiempo, aunque la niebla nos impidió disfrutar de los paisajes durante la primera parte del recorrido, pero la lluvia no se dejó caer y eso ya es de agradecer en la montaña. Nos sorprendimos bastante con el estado de conservación del refugio Miramundos, estaba muy limpio, muy bien dotado, incluso tenía una buena biblioteca montañera. Afortunadamente el día transcurrió sin ningún incidente.
Sábado, 6 de diciembre
Desayunamos a las 6:30 de la mañana, no sin alguna protesta por el madrugón. Lo hicimos así ya que teníamos un recorrido de aproximadamente una hora en coche hasta el punto de partida de la ruta, la Zona de Acampada de Hondacabras, en el pueblo de Torres, la ruta prevista tenía bastante desnivel y en esta época no hay muchas horas de luz. Este día teníamos planes de subir al cerro Cárceles, al Ponce y, para los más aguerridos, también al Almadén, más de 1600 m de desnivel. Este día tres de nuestros compañeros decidieron hacer la opción B, es decir la ruta más corta, y desafortunadamente nuestro apreciado compañero Pedro C. tuvo una caída con consecuencia de un hueso roto. Todos deseamos su pronta recuperación. Este día fuimos obsequiados con las vistas de extensos olivares de los que se extrae el mejor aceite de oliva del mundo. Algunos de nosotros aprovechamos para visitar alguna de las muchas cooperativas aceiteras de la zona, que además en esta época del año están en pleno proceso de recolección de la aceituna.
Domingo, 8 de diciembre
Para no perder la costumbre, volvemos a madrugar y tras desayunar a las 7:00 de la mañana nos pusimos en marcha hacia la zona de Despeñaperros, por donde la mayoría de nosotros hemos pasado innumerables veces, por la carretera, pero nunca habíamos caminado. La parte inicial de la ruta nos resultó bastante agradable, con una vegetación muy bonita y un par de castaños centenarios dignos de ver. El resto de la ruta transcurrió bastante rato por pista, que nos resultó interesante por la gran cantidad de madroños que encontramos. Llegamos al pico Malabrigo donde, para sorpresa nuestra, encontramos con bastante gente de la zona. A la vuelta no era ya tan interesante la pista y la mayoría de nosotros atrochamos para que no nos resultara monótono. Sobre las 15:00 de la tarde, tras asomarnos al espectacular Mirador de los Órganos y cubrir su vertiginoso descenso, fuimos llegando al punto de partida e iniciando el retorno a nuestros distintos puntos de origen. Una sierra más en nuestro haber.
Lo único lamentable de la salida, la caída de nuestro compañero, a quien deseamos lo mejor y que esté de nuevo pronto entre nosotros.
Coordinadora: Daisy Berrios
